domingo, 10 de octubre de 2010

Hasta que deje de ser gracioso

Este post será un punto más personal que de costumbre, así que advertimiento a todas las susceptibles sensibilidades.
En el programa que emitimos mi equipo y yo vía internet, Digues la Teva, hemos tenido una semana complicada.
Una mezcla de percances técnicos y problemas de coordinación entre nosotros han llevado la situación a un punto complicado. Esto me ha llevado a tener que tomar cartas en el asunto y ejercer de director con autoridad relativa, algo que he evitado desdel primer día.
Este hecho me ha llevado a recordar la fantástica obra del guionista Aaron Sorkin, la siempre poco valorada Studio 60 (de la que podeis saber más grácias al blog TeleDiscreta) donde los productores de un programa de humor deben ejercer dejando la comédia a parte en muchas ocasiones.
Se trata de la situación que todo director de un proyecto divertido y de humor (al menos en su mayoría en el caso del Digues la Teva) teme enfrentarse. Esto le de un gran sentido a la respuesta que el actor británico Edmund Gwenn dió a la pregunta "¿Es duro morirse?": "Sí, es duro, pero no tanto como hacer comedia".
Trabajar en géneros como el terror o el drama no es un juego de niños, pero es más facil asustar que divertir. Un susto puede hacer que te cagues encima dos veces, pero un chiste repetido es Jose Luís Moreno. Y cuando un chiste es carne de Matrimoniadas casi mejor nos dedicamos a los teletiendas.
Es duro hacer comèdia y más teniendo que hacerlo serio. Que Dios nos coja confesados, sobretodo al equipo del Digues la Teva.
La semana que viene prometo volver a colgar un post con chorradas frikis sin contenido.

No hay comentarios: